Los mall chinos, nombre usado habitualmente para referirse a estas tiendas misceláneas que ofrecen productos de ese país, han crecido fuertemente en presencia a nivel nacional, pero también lo hacen en preferencia de los consumidores. ¡Si hasta Falabella de Lyon terminó convertido en uno!
Según una encuesta de Cadem dada a conocer esta semana, un 88% de las personas ha ido a un "mall chino" y el 77% lo hace habitualmente.
El 78% de los encuestados dice que compra artículos útiles en esos centros comerciales, mientras un 22% adquiere "cosas entretenidas y novedosas que en realidad no necesita". Los que más visitan estos establecimientos son las mujeres (23%), personas entre 35 y 54 años (30%) y quienes pertenecen a los estratos C2 (30%) y C3 (25%)
Además de hogar y decoración, lo que más compran son artículos para organizar el espacio (37%), artículos escolares, de oficina y papelería (37%) y productos de cocina y gastronomía (29%). Si bien la variedad de productos es el atributo más destacado de estos centros comerciales (57%), la calidad de las cosas que venden es el atributo peor evaluado (6%).
No sé ustedes, pero cuando yo entro a estas tiendas veo muchos letreros llenos de normas y advertencias por todos lados. Y si bien la democratización en el acceso a bienes siempre es relevante, hay que recordar el dicho: "lo barato cuesta caro".